Una dupla que equilibra lo espiritual con lo terrenal.
La cacoxenita es conocida como la piedra de la evolución espiritual, que potencia la intuición y la conexión con el propósito del alma. El ónix negro, con su acabado mate, aporta firmeza, protección y estabilidad frente a las energías externas.
Con terminaciones de acero y un delicado dije de flor en plata ley 925, que simboliza el florecimiento interior y el renacimiento constante.
Un accesorio sobrio y poderoso, que te acompaña en el camino de crecimiento personal con elegancia y presencia.
Talla S - Medida 17.5 cm
Piedra 6 mm
Flor 5 mm